CARRO DE COMBATE CV.33/35
Estos vehículos hacían honor a su nombre, eran carros veloces, pero tanto su armamento (consistente en dos ametralladoras de 8 mm) como su protección, dejaban mucho que desear. En los primeros meses de la contienda estos carros fueron puestos bajo mando español, constituyéndose una compañía que fue empleada en el sur de Madrid.
Posteriormente, y a medida que llegaban más carros Fiat, se fue activando una unidad acorazada mayoritariamente italiana, cuya entidad final llegó a ser la de una Agrupación de Carros, formada por dos batallones y unidades auxiliares e integrada en el “Corpo de Truppe Volontarie” (CTV) italiano.